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por Fernando Pinto

¡Hola! Si usted está aquí para solo tener una reseña rápida porque está leyendo esto en la oficina y no quiere que lo pillen, o solo le da lata leer todo porque, o sea, que lata leer, sírvase a leer el final no más y será feliz.

Si no, aquí vamos:

James Franco es un compadre raro.
Estando dentro del círculo de los actores de Hollywood más cotizados, en más de una ocasión ha sido criticado por sus extrañas elecciones a la hora de dirigir su carrera. Desde aparecer en telenovelas, a volver a la universidad, a producir sus propios documentales sin atractivo comercial, el medio lo ha tildado de “Excéntrico” al no entender el porqué de sus decisiones creativas.
Es un hombre talentoso e incomprendido dentro de su círculo, siempre buscando expresar lo que hay en su mente y alma frente a un mundo hostil.

Tommy Wiseau es un compadre MUY raro.
Un hombre que por años luchó contra lo que Hollywood quería para él. Él llegó a EEUU (No sabemos de dónde) a alguna edad (Nadie sabe qué edad tiene), y no fue aceptado como el actor que él quería ser: el gran héroe americano. Esto parcialmente por su aspecto y su acento (De nuevo, NADIE sabe de adonde viene) y aparente falta de talento actoral.
Fue entonces que, teniendo muchos medios económicos (Nadie sabe de dónde viene su fortuna), decidió escribir, dirigir y protagonizar su propia película “The Room”, estrenada el 2003 y conocida como “La peor película de la historia del cine” y ganando un status de culto rivalizando solo quizás a “Plan 9 from outer space” o “Rocky Horror picture show”

Porsiaca, si va a ver The Room antes de ver Disaster Artist, véanla con amigos y con altos niveles alcohólicos en su torrente sanguíneo. Yo traté de verla 2 veces sobrio en mi casa y no duré más de 45 minutos. Es REALMENTE mala.

Ahora, si tuviéramos un gráfico donde las variables son talento y excentricidad, The Disaster Artist sería el punto donde Wiseau y Franco se intersectan. El punto que tienen en común: La historia del artista incomprendido, que hará lo posible para que el mundo vea su visión y entienda lo que su alma artística quiere expresar.

Basado en el libro The Disaster Artist, escrito por Greg Sestero (productor y actor en The Room), la película nos cuenta desde el punto de vista de Greg lo que fue la incepción, rodaje y estreno de The Room entre los años 98 y 2003, haciendo el paralelo de cómo la amistad entre Greg y Tommy fue el impulso para que esto pasara, y como sus vidas y los quiebres entre ellos guiaron el destino de la producción.

La película está muy bien realizada. Manejando muy bien la línea entre el drama y la comedia, nos lleva de la mano en esta historia que podría tornarse fácilmente absurda, y nos muestra un Tommy Wiseau en momentos empático y amistoso, y en otros un ente destructivo manipulador e inmaduro con quién la tropa de artistas en la producción debe lidiar día a día para la creación de una increíblemente extraña película.
La actuación de Franco es el plato fuerte de la película. Se nota el trabajo de estudio de los manerimos, el acento y el accionar general de Wiseau, y los interpreta en la película de manera increíblemente buena. Un personaje que fácilmente podría terminar siendo caricaturesco se convierte en una persona rota, que solo busca pertenecer y crear su propia familia para alcanzar su sueño de triunfar en Hollywood, haciéndonos sentir a todos parte de su historia.
James Franco además tomó su agenda de contactos y aparentemente llamó a todos los amigos que tiene en Hollywood para llenar los papeles de la historia, con muy buenos resultados. Así que no se sorprendan al ver aparecer alguno de sus favoritos de Pinneapple Express, Los Juegos Del Hambre, Mr. Show, e incluso alguien por ahí que solía cantar en el gimnasio del colegio en High School musical.
Vale mencionar también que se recrearon alrededor de 20 minutos de The Room para esta producción, parte de los cuales están incluidos durante los créditos de la película. El cuidado del timing e interpretación de los personajes al hacer el paralelo con el film original es increíble, lo que nos muestra el cuidado, cariño y respeto que Franco y su equipo sintieron a la hora de adaptar esta historia.

Quizás el punto débil de la película es la necesidad de un conocimiento previo a la historia para poder apreciarla. Si usted no conoce la historia de The Room y no tiene idea quién es Tommy Wiseau, podría perderse del nivel de detalle con el que se trabajó está película. Desde la actuación de Franco, al casting de personas, a incluso la recreación del mismo cartel promocional para la película que Wiseau utilizó el 2003 y que arrendó por casi 5 años posteriormente cuando la película se convirtió en un film de culto.
Si usted no sabe nada de eso, la película aun así será entretenida, pero difícilmente tendrá el peso emocional y geek que puede llegar a tener.

Yo personalmente se las recomiendo. A fin de cuentas termina siendo una historia sobre lo importante de seguir tus sueños, y de cómo el triunfar puede ser posible aunque muchas veces no sea de la manera que nos imaginamos en un principio. Y esto es algo con lo que creo muchos se podrán sentir identificados y hasta inspirados.

Ve, estaba todo en el último párrafo. Ahora puede volver a jugar Candy Crush o ver pornografía tranquila.

PD: Quédese hasta el final de los créditos de la película para que vea el poder actoral del gran Tommy Wiseau.

PD2: Les dejo la invitación para que investiguen sobre The Room y se deleiten con lo freak e inspirador de su historia. Y de paso métase a www.tommywiseau.com y encárguese un pack de boxers originales diseñados por Tommy.
Si.
En serio.
Les dije que el compadre era muy raro.